De niña te enseñaban a ver el mundo en formas geométricas y colores primarios. Era como si los adultos necesitaran equiparte con logros. Luego tenías que pasarte el resto de tu vida desaprendiéndolos. Ésa era la vida, hasta donde ella podía entender. Hacer que todo fuera simple los primeros diez años y, por ese hecho, todo fuera mucho más complicado en los setenta siguientes.



Radio balcon desde la calle Sants informa:

Desde mi balconcito con escritorio, situado en un bonito lugar de barcelona os informaré en los próximos meses, y tal vez años, de mis idas de cabeza. Así como de eso a lo que se le podría llamar "textos" que escribo y surgen solo de mi cabeza. Aunque parezca difícil de creer, desde aquí veo un trozo de cielo bien grande, que hoy está nublado, pero me encanta. Pocas cosas serán como antes. Y a pocos pero mucho, os echaré de menos. Mis niñas, mi chaplin y mi luffyto que forman el duo chuflin, mi mascota hermano, jorol (sabes que siempre esté donde esté, guiri (always, aquí te espero),Jordi oh jordi...,  y como no a la família (a todos a pesar de todo).Desembalando maletas como una histérica, se despide por hoy, desde un balcon de CASI dos metros cuadrados, la loca de Gandia.
Y para aquella gente que creyó y la que no creyó en mi.
Gracias por el apoyo, por vuestra culpa llegué aquí. Y lo voy a aprovechar.
os quiero
us vull
us estime
Santi, amor, cariño, te quiero.

Esto va a molar un puñao, aunque me fuese llorando.
"Cría "MariosBroses" y te sacaran los ojos."

AGH.
A veces mataría a alguien, pero se que no puedo matar ni a una mosca,
 claro que de eso se encarga Gato.
Y luego, así, sin más, otra vez esas ganas de volar y besar. Que olvido lo que no vale la pena.
 Que ya está. Al final, el tiempo pone a cada uno en su lugar.

Que me voy pa' Barnaaa!
Y volveré, claro que volveré, volveré para recuperar cada día un trocito de ese azul.
>....<
El verano vive por siempre en su corazón.
Sabía porque le gustaban los veranos, pero no recordaba porqué.
Echaba de menos algo como esto.
Había olvidado la ensencia de vivir las noches tanto como los días.
Ese agosto le permitió escuchar, hablar, gritar, saltar al vacio, reir, respirar, ser libre, disfrutar, desear, capturar momentos por siempre en su memoria.
Quiso juntarlos a todos, los buenos, malos, viejos, presentes y futuros momentos para poder construir una felicidad neutra entre todos ellos. Quiso cortar de raiz momentos, personas. Y quiso saber cuando debía parar de recordar, cuando fue la última vez que había sido tan feliz.
Simplemente llego a tal punto su presión en que lloró, ya no sabía porqué , pero en ese momento supo que la persona que tenía delante, esa que había hecho un verano soportable para su cabecita, había creado un lugar en su mente donde siempre tendría un hogar, donde se podrían encontrar, donde quedarían guardados los recuerdos de aquel verano y cajones y cajones vacíos para las fotografías que haría en el futuro...

*Y se que soy una cabezota, pero el verano no ha terminado, todavía...
Camisa rota. Pantalones descosidos. Tumbada en la cama. 
El color rosa claro que hasta entonces había gobernado su vida se desteñía, transformandose en un grisaceo fantasmagórico... Y veía una luz, en la ventana, aunque muy lejana, que le decía palabras difíciles de entender. Todo aquello iba a desaparecer.
Tiempo al tiempo, el tiempo pone a cada persona en su lugar.
La confianza se gana, y él quiere ganársela.
Las lágrimas nos harán fuertes. Nos moldearán. Nos harán ser diferentes a los demás.
Gritos, suspiros, sollozos, lágrimas, no sabía como entender...
Y ahora, un poco más, pero ella lo entiende.