De niña te enseñaban a ver el mundo en formas geométricas y colores primarios. Era como si los adultos necesitaran equiparte con logros. Luego tenías que pasarte el resto de tu vida desaprendiéndolos. Ésa era la vida, hasta donde ella podía entender. Hacer que todo fuera simple los primeros diez años y, por ese hecho, todo fuera mucho más complicado en los setenta siguientes.





Por cada paso que das, yo te doy una esperanza.
Sigue con tus sueños y siente las olas del mar, 
mientras uses el agua a tu favor. 
(Aunque duela menos cuando el agua es dulce)
Lo mismo, nos cansamos a la mitad del camino, 
pero lo volvemos a intentar al dia siguiente.

Creo que deberías mirar mas allá de lo que se asoma a la punta de tu nariz.




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