De niña te enseñaban a ver el mundo en formas geométricas y colores primarios. Era como si los adultos necesitaran equiparte con logros. Luego tenías que pasarte el resto de tu vida desaprendiéndolos. Ésa era la vida, hasta donde ella podía entender. Hacer que todo fuera simple los primeros diez años y, por ese hecho, todo fuera mucho más complicado en los setenta siguientes.



Sueños estravagantes contigo.

Las seis de la mañana es ese momento en que voy por mi tercer sueño normalmente. Ayer, terminaba de empezar el primero. He soñado que tu me despertabas. No me despertabas como la gente normal lo suele hacer. Tu te acercabas y sonreias al verme ahi tirada en la cama. Tu te acercabas y susurrabas en suspiros mi nombre.
He soñado que tenía los pelos de punta, pero a ti no te importaba. He soñado que dibujaba en las paredes de mi casa cosas que nunca sabre muy bien dibujar. He soñado que tenía un perro en lugar de un gato. He soñado tantas cosas falsas creadas en mi mente que cuando he despertado, creía que estabas ahí a mi lado mirandome. He llamado a mi gato por el nombre de tu perro. He mirado las paredes y he llorado. Me he mirado en el espejo y por primera vez estaba perfecta.
He descubierto, que las seis de la mañana es un buen momento para tener el primer sueño de toda la noche.

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